Descubre en este artículo cómo llevar a cabo un análisis de materialidad paso a paso y aprovecha todos lo beneficios que puede tener para tu empresa.
Introducción
Materialidad. Esa palabra que tiene un significado tan diferente para un profano de la Sostenibilidad y que es tan conocida cuando la pronuncia un profesional de la Responsabilidad Social.
La RAE cuenta con tres acepciones, pero ninguna de ellas se refiere a materialidad vinculada con la elaboración de memorias: Cualidad de material; superficie exterior o apariencia de las cosas, y sonido de las palabras.
¿Y entonces de dónde viene la materialidad en el mundo del desarrollo sostenible? Pues del inglés ‘materiality’ y de las guías para la elaboración de memorias de sostenibilidad de GRI, el principal estándar que emplean las empresas para rendir cuentas de su actividad.
En este artículo vamos a tratar de dar respuesta a cómo elaborar un análisis de materialidad al que cada año se tienen que enfrentar las empresas para compartir con los diferentes grupos de interés su desempeño económico, social y medioambiental.
Contexto del análisis de materialidad
Antes de meternos de lleno a ver cómo elaborar un análisis de materialidad, veamos un poco de contexto sobre esta herramienta.
¿Qué es un análisis de materialidad?
Es un proceso que permite identificar los temas más relevantes para la empresa y priorizarlos, además de conocer aquellos que más preocupan a los grupos de interés y cómo impactan en el modelo de negocio y a la inversa. También ayuda a alinear la estrategia de sostenibilidad con las expectativas de los grupos de interés.
Como recomienda GRI, el informe de sostenibilidad debe reflejar:
- Los impactos económicos, ambientales y sociales significativos de la organización.
- Que influyan sustancialmente en las valoraciones y decisiones de los grupos de interés.
Se entiende como “impacto” al efecto que una organización tiene sobre la economía, el medio ambiente y/o la sociedad (positivo o negativo). Un tema puede ser relevante (y, por lo tanto, potencialmente material) en base a solo una de esas tres dimensiones.
¿Quién hace un análisis de materialidad?
Cualquier empresa u organización puede realizar ese análisis de materialidad para conocer qué aspectos son relevantes en su gestión, pero sobre todo las compañías que llevan tiempo elaborando informes de sostenibilidad y ya están familiarizadas con ellos, lo que les permite enfocar bien el uso de recursos para generar el máximo impacto en los grupos de interés.
Desde este año, las empresas con más de 250 empleados están obligadas por ley a reportar sus cuestiones ASG/ESG en el Estado de Información No Financiera (EINF).
Beneficios para la empresa del análisis de materialidad
El análisis de materialidad es un componente esencial de una estrategia de sostenibilidad empresarial efectiva. Proporciona una base sólida para tomar decisiones informadas sobre las prioridades y acciones a tomar.
Al integrar un análisis de materialidad en sus operaciones, una empresa puede obtener beneficios significativos que pueden impulsar tanto su desempeño empresarial como su perfil de sostenibilidad. Los beneficios principales incluyen:
- Mitigación de riesgos: El análisis de materialidad identifica los riesgos ambientales, sociales y de gobernanza (ASG) que son más relevantes para su negocio. Al entender y abordar estos riesgos, puedes evitar costosos problemas legales, reputacionales y operativos. Además, una gestión de riesgos efectiva puede conducir a una mayor confianza y credibilidad con los inversores, clientes y otras partes interesadas.
- Focalización del impacto positivo y minimización de los impactos negativos: El análisis de materialidad te permite identificar y priorizar las áreas donde tu empresa puede tener un impacto positivo significativo. Al mismo tiempo, ayuda a minimizar los impactos negativos en estas áreas. Esto puede conducir a una mayor eficiencia operacional, mejoras en la reputación de la empresa y un aumento en la lealtad de los clientes y empleados.
- Mejora de la comunicación con los grupos de interés: Un análisis de materialidad bien hecho refleja la participación y las expectativas de tus grupos de interés. Esto puede mejorar las relaciones con estos grupos y promover una comunicación más abierta y efectiva. Al entender y responder a sus preocupaciones, puedes aumentar la satisfacción y lealtad de los grupos de interés, lo que a su vez puede resultar en beneficios comerciales a largo plazo.
En definitiva, un análisis de materialidad puede proporcionar a tu empresa una visión clara de sus prioridades de sostenibilidad, ayudándote a tomar decisiones más informadas, a gestionar mejor los riesgos y a crear un valor duradero para tu negocio y para todos tus grupos de interés.
¿Cómo elaborar un análisis de materialidad paso a paso?
Aquí te proporcionamos una guía de cinco pasos de APLANET para elaborar un análisis de materialidad eficaz:
1. Definir bien los grupos de interés
Los grupos de interés pueden variar ampliamente dependiendo de la industria y el tipo de negocio, pero pueden incluir accionistas, inversores, empleados, proveedores, clientes, comunidades en las que operas, ONGs y medios de comunicación. Comprender quiénes son tus grupos de interés y qué cuestiones son importantes para ellos es el primer paso para realizar un análisis de materialidad.
2. Elaborar un benchmark
El benchmarking permite comparar tu empresa con otras en el sector para identificar las mejores prácticas y las tendencias actuales en lo que respecta a los temas materiales. Te da una idea de dónde se encuentra tu empresa en relación con otras en términos de sostenibilidad, lo que puede ayudarte a establecer objetivos realistas y medibles.
3. Consultar a los grupos de interés
Realizar consultas con tus grupos de interés puede proporcionar información valiosa sobre las áreas en las que tu empresa está funcionando bien y las que requieren mejora. También puede ayudar a identificar nuevas oportunidades para mejorar la sostenibilidad. Estas consultas pueden llevarse a cabo a nivel interno con los empleados, así como a nivel externo con otros grupos de interés.
4. Analizar los resultados de las encuestas
Tras las consultas, es importante analizar los resultados para obtener una imagen clara de las cuestiones materiales para tu empresa y tus grupos de interés. Este análisis puede ayudar a determinar qué temas son más relevantes y deben ser priorizados.
5. Priorizar los temas en orden de importancia
Basándose en los resultados del análisis, debes priorizar los temas en orden de importancia. Esto debe hacerse en colaboración con el consejo de administración y el comité directivo para garantizar que la estrategia de sostenibilidad de la empresa esté alineada con sus objetivos y capacidades generales. Los temas deben ser ilustrados en una matriz de materialidad para visualizar su relevancia para la empresa y sus grupos de interés.
Realizar un análisis de materialidad de manera efectiva puede ayudar a una empresa a identificar y abordar las cuestiones de sostenibilidad más importantes, reduciendo los riesgos y aprovechando las oportunidades para mejorar su desempeño en sostenibilidad.
Consejos
Aquí te dejamos algunos consejos que te pueden ser útiles para elaborar un análisis de materialidad en tu empresa de forma eficaz:
- Apoyarse en estándares de sostenibilidad como GRI o SASB, teniendo en cuenta que la empresa puede adaptar los temas relevantes a su realidad para gestionar y minimizar sus impactos.
- Contar el apoyo de la alta dirección en el impulso de la Sostenibilidad.
- Usar herramientas y tecnología para dar seguimiento de los indicadores.
- Realizar un seguimiento continuo de los compromisos en cuestiones ASG requieren tiempo y recursos de la empresa.
Existen soluciones como SUSTAINABILITY con la que se facilita el seguimiento de la evolución de los indicadores y la recogida ágil de la información. Si quieres más información, no dudes en contactarnos.
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